En octubre del año pasado te contamos que el productor, Harvey Weinstein, se vio involucrado en graves acusaciones sobre acoso sexual.
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Gracias a esa acusaciones las actrices de Hollywood decidieron levantar la voz y crear el movimiento #MeToo: un espacio para hablar sobre el abuso y la agresión sexual que hasta el momento era un secreto a voces.
El día de hoy viernes 25 de mayo (7 meses después de las primeras acusaciones) Harvey se entregó a las autoridades de Nueva York voluntariamente para responder por los cargos de abuso sexual y violación contra 2 mujeres.
90 minutos más tarde, Weinstein salió del lugar después de pagar 1 millón de dólares en efectivo y bajo libertad condicional.
¿Qué significa esto?
El ahora «exproductor» NO irá a la cárcel por los cargos presentados, en su lugar la policía de Nueva York le colocó un dispositivo de localización teniendo como única condición no salir de Nueva York o Connecticut.
Asimismo, Harvey se vio obligado a entregar su pasaporte, el cual estará controlado por una etiqueta electrónica en caso de que quiera dejar el país.
Un castigo que no alcanza
Harvey Weinstein fue juzgado sólo por 2 acusaciones cuando la lista de mujeres que confesaron insinuaciones del director es más de 50. Él continúa negando haber tenido relaciones por la fuerza con dichas mujeres y asegura que todos sus encuentros han sido por «acuerdo mutuo».
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Sin embargo, no todas las noticias son malas, la policía federal de Estados Unidos sigue investigando temas sobre abuso sexual. Harvey tendrá otra audiencia con la corte el 30 de julio donde la evidencia podrá presentarse para que Harvey al fin reciba el castigo que merece.
